Publicamos carta dirigida a la Subcomisión de Educación de la Asamblea nacional suscrita por organizaciones gremiales, universitarias, académicas, sindicales y de la sociedad civil vinculadas al hecho educativo. 
Caracas, 2 de marzo de 2016

Honorable diputado
Juan Requesens
Presidente
Subcomisión de Educación de la Comisión de Desarrollo Social
Asamblea Nacional
República Bolivariana de Venezuela

Las organizaciones que suscriben han tomado la iniciativa de enviarles este primer documento, de carácter introductorio, con el fin de señalar algunos elementos de la profunda crisis que vive la educación venezolana, sus causas estructurales, algunos problemas puntuales que la identifican y la necesidad de unir las distintas corrientes del pensamiento democrático para impulsar las transformaciones requeridas en el sistema.
Hemos construido a lo largo de los años una fecunda relación entre los padres, docentes, estudiantes, universidades, iglesias, academias, medios de comunicación y otras organizaciones de la sociedad civil, aspirando extenderla a gobiernos regionales y locales y otras entidades pertinentes.
Es haciendo uso de esa legítima representación que nos hemos preparado para trabajar coordinadamente con la Asamblea Nacional, alentados por el mayor activismo y preocupación político-social que está desplegando. De entrada, sabemos que esta Asamblea desea darle un alto rango a la materia educativa, razón más que suficiente para que trabajemos en forma unida.
La crisis del sector, como el país siente y sabe, abarca todos los subsistemas y modalidades. Va desde la Educación Básica hasta la Universitaria, incluyendo la Especial –cuyo abandono es alarmante- y otras modalidades de formación, así como los programas de emergencia que han pretendido dar respuesta a este grave problema, como son las misiones educativas.
Hemos identificado que la causa fundamental de esta situación se encuentra en la concepción no democrática que guía las acciones del Gobierno Nacional en esta materia.
Resulta preciso subrayar como síntoma de descomposición nacional el deplorable estado a que ha sido reducida la enseñanza universitaria. Evitar que colapse es una obligación moral de todos los comprometidos en la tarea de salvar a Venezuela. Por ello no podemos priorizar nuestra atención en uno u otro subsistema, sino sobre todo su conjunto.
Abordaremos con ustedes las causas estructurales y la índole del lamentable modelo educativo vigente. Es un sistema no participativo, estrangulado sin causa racional por el gobierno nacional y maltratado por la falta de atención a sus problemas reales que incluyen carencias en inversión, planificación y gestión del sistema, así como el desmejoramiento de la calidad de la enseñanza e imposición de un pensamiento único, orientado a destruir el pluralismo de las ideas propio de las sociedades democráticas, que son las verdaderas garantes de los derechos humanos.
Entre ellos, valdría la pena destacar, por su incidencia en la propia vida de las comunidades educativas, algunos problemas puntuales que son del dominio de la opinión pública, tales como la degradación de los salarios y condiciones de trabajo de los docentes, el ruinoso estado de la infraestructura escolar y la peligrosa mengua del Programa de Alimentación Escolar, después de haber sido centralizado.
Resulta imprescindible comenzar por elaborar una línea estratégica común que, en tiempo y espacio, oriente eficazmente los esfuerzos en el marco de la diversidad de las corrientes de pensamiento. Se trata de conjugar las opiniones de todos los sectores participantes en el proceso educativo, para transformar hondamente nuestra precaria educación. 
Quisiéramos iniciar el primero de muchos y futuros encuentros con una proposición preliminar: que la Asamblea Nacional, en uso de sus atribuciones constitucionales, declare la Emergencia Educativa y promueva la constitución de una comisión mixta de amplia participación de este órgano legislativo y de los factores actuantes en el sector, con el objeto de abordar ahora mismo la delicada tarea que nos ocupa.
La Educación, después de la Constitución, es el segundo pacto social de envergadura nacional. Teniéndolo presente esperamos de este encuentro que ahora iniciamos, tenga el más consensuado, viable y generoso de los resultados.
Cordialmente, suscriben,

Fundación Casa Uslar Pietri

Federación de Padres- Fenasopadres

Observatorio Educativo Venezolano

Colegio de Profesores de Venezuela

Memoria Educativa de Venezuela

Movimiento de Educadores Simón Rodríguez

Federación Venezolana de Maestros

Asociación Civil Forma

Exrector Universidad Pedagógica Libertador

Asociación Civil Asamblea de Educación

Asociación Civil Provive

Federación de Trabajadores del Magisterio

Asociación de Profesores Upel- Aproupel

Red de Derechos Humanos en Educación

Instituto Pedagógico de Caracas-

Asociación de Jubilados- Asojubypen

Asociación Civil Padres Organizados

Escuela de Educación- UCAB

Asociación Cáritas de Venezuela

Organización Fe y Alegría

Consejo Nacional de Laicos

Asociación Nacional de Instituciones Privadas- Andiep.

Asociación de Educación Popular- Apep.

Asociación Venezolana de Educación Católica –Avec.

Asociación Civil Educación para todos- Ept.

Centro de Reflexión Educativa –Cerpe

Doctorado Escuela de Educación UCV

Federación de Trabajadores de la Educación

Colegio de Licenciados en Educación- Clev

Instituto de Altos Estudios- IESA

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.