Hay condiciones más que suficientes para construir una victoria contundente frente al actual régimen, si fortalecemos la unidad interna, no generamos polémicas subalternas y dotamos de amplitud, grandeza y aliento histórico la alternativa que estamos construyendo. Las elecciones primarias son la oportunidad para labrar esa esperanza de cambio. Como eje de este esfuerzo, van estrechamente ligadas al Compromiso por un Gobierno de Unidad Nacional, aprobado el lunes pasado, y a las líneas generales del programa de gobierno que serán presentadas el venidero 23 de enero de 2012. Otro importante factor para lograr el triunfo es vincularnos y estimular las luchas sociales que fortalezcan un movimiento popular autónomo, democrático, fuerte y decidido. Así evitaremos que la polarización desvíe la atención de los problemas y angustias de la gente y reduzca la política al monotemático dilema Chávez SÍ-Chávez NO.
Para las primarias del venidero 12 de febrero y dentro de un granado grupo de venezolanos y venezolanas con suficientes méritos y virtudes para optar a tan digna representación, hemos decidido respaldar a Pablo Pérez, reafirmando nuestra palabra de acompañar al candidato que en esos comicios abiertos sea escogido para las elecciones del 7 de octubre. Consideramos que Pablo Pérez está en mejor capacidad y disposición de unir a los sectores opositores y a todo el pueblo descontento en la búsqueda del cambio en democracia. Creemos que Pablo Pérez es garantía de honrar el compromiso, de llevar a la práctica el programa unitario y de abrir los senderos para construir una Venezuela de bienestar, justicia social, independencia y soberanía. Además, Pablo Pérez es quien reúne las mejores condiciones para el triunfo.
La búsqueda principal es lograr la ampliación de espacios democráticos de participación y propiciar el debate y el entendimiento en la idea de generar la reconciliación de la familia venezolana, al mismo tiempo que se despliega la acción pública para lograr el clima propicio para la recuperación económica, la diversificación de la economía, el desarrollo industrial y agrícola del país, en fin, para alcanzar mejores condiciones de vida y de trabajo y así sacar de la pobreza a un importante contingente de venezolanos y venezolanas. Trabajadores, universitarios, profesionales, productores del campo y la ciudad, habitantes de barrios y urbanizaciones populares debemos participar en la escogencia del candidato democrático que pueda dar un nuevo rumbo al país.
Pablo Pérez brinda una mayor oportunidad para el reconocimiento y ampliación de los derechos sociales contemplados en la Constitución, para que ellos no sigan siendo presentados como dádivas generosas del autócrata actual. Porque con Pablo Pérez al frente de la Unidad Nacional podemos hacer que se respete la autonomía de los poderes públicos y las potestades de los gobiernos regionales y municipales y de los organismos del Poder Popular. No se trata de sustituir una hegemonía por otra sino de desterrar las aberraciones antidemocráticas y dar pleno curso al cumplimiento de los derechos humanos y las libertades públicas, abriendo espacios para una democracia de nuevo tipo que rompa con el desastre presente y no quiera repetir los errores del pasado.
Comité Central de Bandera Roja