Belsaí Yanez, Secretaria General de Bandera Roja Anzoátegui |
EL TIGRE. En su mensaje de fin de año, la directiva del Comité Político Regional del Partido Bandera Roja en Anzoátegui, se dirigió al “pueblo honesto e inquebrantable, al que mantiene la esperanza en un cambio real y profundo” para alentarlo a seguir, en el año 2016, firme en sus luchas por una vida digna y por la libertad.
La secretaria general de BR en la región, Belsai Yánez, con su adjunto Pedro Betancourt, en unión con otros reconocidos miembros directivos como Gustavo González, Nimer Valles, Glorimar Guzmán, Javier García y Yamileth González, manifestaron que es importante ser realistas y entender que la agobiante crisis que se agudizó en el 2015 tiende a agravarse en el 2016. Señalaron que los análisis indican que la situación económica va a ser más dura el año venidero, producto de la vertiginosa caída del precio del petróleo, por la desbastada producción nacional, por la dependencia y entrega de riquezas a sectores imperialistas encabezados por China y Rusia y EE.UU. Por ello consideran que en el año 2016 “se requiere de la articulación de fuerzas y luchas con un fuerte protagonismo social, como plataforma impulsora de una auténtica unidad nacional (la del pueblo), para lograr ese cambio verdadero que desea la mayoría y el inicio de un proceso de reconstrucción nacional”.
Los directivos de BR en el estado manifiestan que “así como han denunciado que este gobierno no es socialista y que es una farsa, también denuncian el giro que le está dando la MUD a la fuerza parlamentaria adquirida. Hay que estar alerta con la visión política que se revela en la agenda parlamentaria que se presentó donde dan relevancia al aumento de la productividad en lugar del impulso de la producción nacional, en la que tampoco se daba la importancia necesaria a la libertad de los presos políticos y a los exiliados. A todo ello agregan que las afirmaciones de Capriles Radonski descalifican las luchas y protestas cívicas, amenazando incluso, colocando a la MUD en el papel de bombero del régimen y de colaboracionista de sus medidas represivas, persecutorias y hasta de sus nefastas medidas económicas”.
“También nos parece miserable que los deseos de cambio vayan a ser conducidos únicamente a complacer vanidades y deseos presidencialistas, y a incrementar las pugnas candidaturales en todos los escenarios, incluso los regionales.
No se observa en la dirigencia opositora un aliento histórico para enfrentar la crisis general, para impulsar una gran unidad nacional que saque las raíces del actual régimen, para construir un programa de salvación de nuestra patria, para desarrollar la política. Impera una visión oportunista y rapaz, con un uso parcializado de las cuotas de poder, bajo la falsa idea de que el poder puede ser rebanado. Dicen querer impulsar el cambio económico, pero manteniendo el statu quo, con este régimen y con el gobierno de Maduro, principal blanco del voto castigo en las pasadas elecciones”, agregaron.
A juicio de los dirigentes de BR, la MUD, de seguir por ese camino, traerá una nueva decepción o frustración en los deseos de cambio del pueblo venezolano. Pretender que la derrota parlamentaria es suficiente y no querer hacer uso de las potestades constituyentes o revocatorias de la mayoría calificada en la Asamblea Nacional es no entender el mandato del pueblo, es castrar la lucha política y convertirla en un sainete que cuida los modos y las maneras para no irritar a los gobernantes.
“Bandera Roja, así como ha desenmascarado este falso socialismo del siglo XXI, no convalidará esta vil estafa en la oposición. La esperanza y el futuro de Venezuela merecen una mejor y más sabia conducción. 2016 será el año en que las máscaras serán derrumbadas y el pueblo venezolano abrirá los caminos de una nueva democracia”, apuntaron.
En ese sentido, consideran que la esperanza de Venezuela es la democracia y la revolución industrial. Es respeto a la organización ciudadana, social y sindical sobre la base de una nueva democracia, no de mayorías que aplastan, sino de inclusión y respeto. Es la búsqueda del desarrollo productivo con protección de la industria y agroindustria para alcanzar el autoabastecimiento alimentario, lo que requerirá dirigir la riqueza petrolera hacia el desarrollo productivo y no al negocio de la riqueza fácil. Es la edificación de un nuevo Estado, eficiente, honesto y con una nueva ética de servicio, con una justicia que castigue al delincuente y premie la honestidad. “Urge en definitiva un nuevo régimen político, radicalmente distinto al que este grupo de mafias construyó para su provecho particular. Quienes militamos en Bandera Roja estaremos, como siempre”.
Fuente: El Mundo Oriental
jueves, 31 de diciembre de 2015