La contundente y cada vez más acelerada descomposición del régimen que ha destruido la patria en los últimos años pareciese abrir las puertas a una oportunidad de enrumbarnos hacia la construcción de un nuevo modelo de gestión política y económica que no se parezca a esta parodia circense del “socialismo del siglo XXI” o a la ya fenecida “democracia representativa”, en cuyo seno y gracias a la exclusión, se incubó esta enfermedad neo fascista, cuya expresión inequívoca es la aparición del gorilismo militarista que hoy sufrimos los venezolanos .
Ahora bien, en este marco de “oportunidades”, cual caja de pandora, abundan las sorpresas. Una de ellas, lamentablemente para quienes hemos adversado este régimen, es conseguirnos con que los SINIESTROS siguen incólumes, siguen potenciados, no solo en el aparato gubernamental y sus organismos, sino en algunas esferas de quienes pretenden convertirse en potencial salvación a este desastre. Ese es el caso que nos ocupa, que nos mueve a denunciar.
Envilecidos por adjudicarse numéricamente mayorías en el universo de la oposición, los SINIESTROS atropellan, estigmatizan y desprecian a muchos venezolanos que agrupados en “partidos minoritarios” o células de acción de la sociedad civil (que no han cesado ni descansado siquiera en la lucha diaria, en la confrontación, en la resistencia permanente y muchas veces desconocida al oprobio), hoy el cogollo de la llamada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) creyéndose victorioso y ungido por el destino, cabalgando sobre el caballo del descontento y gracias a la necesidad de millones de venezolanos de acabar con la farsa chavista, reedita la traición y la cobardía observada cuando se sentaron con los asesinos y sus secuaces internacionales en las jornadas de lucha del año 2014; ya no solo escogiendo a dedo al mayor porcentaje de los postulados, sino creando mecanismos de coacción similares a las inhabilitaciones gobierneras, al no permitir que organizaciones diferentes a las que se reparten en el cogollo la “torta parlamentaria”, puedan postular o adherirse a aquellos candidatos que tuvieron el arrojo y la valentía democrática de someterse al escrutinio de unas primarias que legitimaron su aspiración y que lo hacen susceptibles a ser apoyados por la sociedad democrática en su conjunto y no solo por la MUD.
Denunciamos desde Bandera Roja (resistencia) la demostrada complicidad del cogollo de la MUD con el régimen en el arrebato de nuestras siglas y tarjeta electoral, la cual fue colocada en manos de quintas columnas “reconocidos” y “adoptados”, cual mascota, por la MUD en su momento.
Denunciamos la extraña práctica partidista, sectaria e ignominiosa de meter a los “candidatos” de la MUD en una especie de corral en el cual no pueden ser ayudados, aupados o postulados por otros partidos que no estén adscritos a esa instancia. Es decir, solo se cuentan como “opositores” legítimos, llenos de la “gracia oficial”, a aquellos que sirvan a la comparsa de estas formas “participativas” (porque te participan o avisan) de hacer política.
En la MUD Trujillo no se vive otra realidad. En dicha mesa (en la cual habíamos participado hasta mediados del año pasado), entendemos la indisposición de esos “valerosos y respetuosos” compañeros opositores de cuestionar y/o guerrear contra las decisiones impuestas desde los cogollos caraqueños. Los sabemos “disciplinados”, pero es necesario reflexionar.
Bandera Roja (resistencia) ratifica su política electoral de inscribir a los candidatos de la MUD que se hayan ganado su espacio en las primarias, esta vez amparados en una fórmula electoral de un sector de la oposición (con tarjetas registradas y con militancia de carne y hueso), que comparte la visión y necesidad de conformar un amplio gobierno de unidad y reconstrucción nacional. Apoyaremos algunas tarjetas de organizaciones que no están en la MUD y de comprobada experticia en el campo de la lucha contra la farsa chavista, reservándonos en aquellos espacios que no fueron sometidos a las primarias la posibilidad de inscribir a luchadores sociales, ecologistas, gremialistas, o hasta los propios candidatos MUD, en el caso de que contase con un esperado apoyo popular.
Sin embargo, la posibilidad de empujar para ganar los circuitos 1 y 2 del estado Trujillo por parte de este pequeño pero significativo grupo, ha sido rechazada de plano por la MUD, instándonos incluso a no inscribir, es decir, a “desaparecer” del escenario electoral solo por no alinearse a la forma en que estos “grandes partidos” manejan a conveniencia la “radicalidad” o el “muñequeo” con el gobierno.
Estamos conscientes de la gran responsabilidad que implica una postura como la nuestra. Hemos hecho todo lo posible por llegar a un acuerdo en materia electoral que posibilitara nuestro apoyo a las fórmulas ganadoras en las primarias de la MUD, y solo recibimos el silencio que se acerca al momento en que no podamos inscribir. Es una jugada que pretende inhabilitar nuestro transparente accionar político, ese accionar que no varía o acomoda “principios” según sea el escenario, que no cambia de la noche a la mañana y que se gana el desprecio de aquellos que solo cuentan, como el chavismo, la cantidad de votos y no la calidad de las propuestas de reconstrucción de la patria.
En Bandera Roja (resistencia) hacemos hincapié en la búsqueda de una Unidad Superior que no se circunscriba a la MUD y en la cual ésta debe estar integrada como importante factor, obviamente, combatiendo internamente sus ambivalencias y colaboracionismo. Hacemos énfasis en la necesidad de sumar cada vez más un mayor número de sectores a la larga lucha democrática que estamos librando y que recrudecerá seguro de cara y después de las parlamentarias y que necesitará a TODOS los venezolanos con ansias de cambio, no solo a los “entendidos” y gurúes que menosprecian a quienes no dudamos, a pesar de las traiciones, en confrontar en la primera línea de combate al opresor, a quienes como nosotros la solidez de sus principios nos han convertido más que en un voto, en una reserva ética del pueblo venezolano.
Secretariado Ejecutivo del CPR Trujillo de Bandera Roja (Resistencia)
04 de Agosto de 2015